Si alguna vez te preguntas qué inspira a los emprendedores a crear un negocio, normalmente es por un problema común al que nos enfrentamos los seres humanos. Los emprendedores ven los problemas comunes como oportunidades. Se les ocurren formas de resolverlos y, en el caso de las personas, cuanto mayor es el problema, más dispuestas están a pagar a alguien que tenga la solución. Aunque parezca sencillo, a veces nos cuesta darnos cuenta de los problemas y convertirlos en oportunidades, pero aquí hay consejos que pueden ayudarte.

Experiencia personal

Antes de buscar a tu alrededor, mira primero dentro de ti. ¿Hay algún problema al que te enfrentas? Si la respuesta es afirmativa, ¿existe una solución para ese problema? Si no es así, podría ser una oportunidad de negocio para usted. Aunque es poco probable que todas las personas compartan la misma lucha, es probable que no seas el único que se enfrenta a este problema. Cuanto más personal es un problema, más conectado y apasionado te sientes al crear una solución para él.

Pregunte a su familia

A veces, nos puede costar identificar los problemas, sobre todo cuando se han convertido en algo demasiado habitual. Por eso, también es bueno acercarse a los miembros de la familia y pedirles ayuda. Como son tu familia, podrían ser los mejores proveedores de información para ti. Si tienes productos que quieres probar pero aún no te sientes muy seguro de compartirlos con otras personas, también puedes hacer que los miembros de tu familia sean tus probadores de productos. También es importante que les digas que deben dar una opinión imparcial y que te la den directamente.

Pregunte por ahí

Otra forma de identificar los problemas y convertirlos en oportunidades es ampliar la información y preguntar a los consumidores sobre sus necesidades. La creación de una encuesta le permite ver un patrón, que a su vez le ayuda a identificar el problema más común. ¡Et voilà! Ya tienes una oportunidad de negocio.

Mejorar las cosas

La cuestión es que el hecho de que un determinado problema ya esté resuelto no significa que no se pueda mejorar. La innovación no se limita a la creación de algo nuevo, sino que también puede significar la mejora de los inventos existentes. Ya sea para hacerlo más ecológico, eficiente o asequible, puede ser una aventura empresarial que puedes explorar. No tiene que ser necesariamente un gran cambio. A veces, basta con un pequeño retoque para que sea mejor que antes.